La primera lectura de la liturgia de la palabra de la misa de hoy 18 de noviembre es del comienzo del libro del Apocalipsis (1,1-4;2,1-5a), y dice así:
Revelación de Jesucristo, que Dios le encargó mostrar a sus siervos acerca de lo que tiene que suceder pronto. La dio a conocer enviando su ángel a su siervo Juan, el cual fue testigo de la palabra de Dios y del testimonio de Jesucristo de todo cuanto vio. Bienaventurado el que lee, y los que escuchan las palabras de esta profecía, y guardan lo que en ella está escrito, porque el tiempo está cerca.
Juan a las siete iglesias de Asia:
«Gracia y paz a vosotros
de parte del que es, el que era y ha de venir;
de parte de los siete Espíritus que están ante su Trono».
Escuché al Señor que me decía:
Escribe al ángel de la Iglesia en Éfeso:
«Esto dice el que tiene las siete estrellas en su derecha, el que camina en medio de los siete candelabros de oro. Conozco tus obras, tu fatiga, tu perseverancia, que no puedes soportar a los malvados, y que has puesto a prueba a los que se llaman apóstoles, pero no lo son, y has descubierto que son mentirosos. Tienes perseverancia y has sufrido por mi nombre y no has desfallecido. Pero tengo contra ti que has abandonado tu amor primero. Acuérdate, pues, de dónde has caído, conviértete y haz las obras primeras».
Comentario:
Épocas de la historia de la Iglesia de Dios. Las siete Iglesias
El siete es el número de la totalidad.
En el Apocalipsis se hallan diversos septenarios. El de las Iglesias refleja los diversos estadios de la historia de la Iglesia de Cristo.
Las Iglesias, como los días de una semana, siete, caminan hasta ese último día, domingo, día del Señor; así camina la Iglesia, en sus diferentes etapas, hasta la época séptima, en que Cristo será reconocido y adorado como Señor de todo.
En la sexta época de la Iglesia, en la que nos encontramos, día sábado de la semana, es el día de la Virgen Maria, de ahí que este tiempo presente sea muy mariano y en el que jugará un papel decisivo.
Las Siete Iglesias a las que se envían sendos mensajes (Ap 1-3) son Éfeso, Esmirna, Pérgamo, Tiatira, Sardes, Filadelfia y Laodicea, que son tipos simbólicos de siete épocas del devenir histórico de la Iglesia. Las cuales están en la palma de la mano del Señor de la Historia, Cristo.
Cuando cada ángel correspondiente a cada época e Iglesia, habla por boca de Cristo, al hacerlo a las a las primeras Iglesias hay un constante impelerlas a purificarse; pero cuando llega a la sexta, la de Filadelfia, la petición de que se arrepientan se trueca en “vengo pronto” (Ap 3,11).
La iglesia de Éfeso:
Es la iglesia de los inicios.
La iglesia de Esmirna:
La Iglesia es perseguida por los judíos desde su mismo nacimiento y cuando comienza a extenderse por toda el Asia la mala predisposición de estos se acentúa, pero además comienza como metodología el calumniar a los cristianos ante las autoridades romanas y le dan al imperio la posibilidad de disponer de un chivo expiatorio para poder culparlo de sus dificultades. Las figuras divinizadas de los césares ven en el cristianismo un peligro cierto de la pérdida del absolutismo de su poder. De modo que durante el periodo de esta iglesia se produjeron crueles persecuciones, calificables de demoníacas.
A esta iglesia no se le reprocha nada, la dureza de las persecuciones y el sufrimiento de los fieles compensan cualquier error, sin embargo se le da un mandato: permanecer fiel hasta la muerte o sea el martirio. Se pide esta fidelidad extrema ya que por la crueldad de las persecuciones es fácil caer en la tentación de ceder ante el poder y así hubo cristianos, incluidos miembros del clero, que renegaron de Cristo para salvar su vida.
El periodo de esta iglesia concluye el año 312. Constantino y el Edicto de Milán marcan el comienzo de la siguiente época.
La iglesia de Pérgamo:
Esta iglesia tiene su tiempo desde el edicto de Milán, año 313, hasta el papado de San Gregorio Magno, año 590.
Pérgamo quiere decir libros y es la época de grandes Doctores de la Iglesia: Lactancio, San Ambrosio, San Agustín y muchos otros. Se establecen las bases doctrinales y teológicas contra las herejías que buscan racionalizar el cristianismo y quitarle todo misterio, tocando cuestiones fundamentales de la doctrina trinitaria y cristológica.
La iglesia de Tiatira:
La figura de Cristo es imponente y trasunta poder. Él es cabeza de la Iglesia, que es su cuerpo místico. En este tiempo la Iglesia dominará el panorama sociopolítico de occidente. Una Iglesia con peligro de magia (2,18-29). Esta época se extiende desde el año 590 hasta el 1545, con el Concilio de Trento.
La iglesia de Sardes:
Cristo cuida de la Iglesia y la protege, y a partir de esta época únicamente la permanente atención del Señor la sostendrá de las duras pruebas que la esperan. El tiempo de esta Iglesia se extiende desde el año 1563 hasta mediados del siglo XX. Se entronizará en el mundo el humanismo sin Dios. Se dará la persecución de la Iglesia por ideologías materialistas revolucionarias. Habrá muchos mártires.
La iglesia de Filadelfia:
Es la iglesia actual. Desde 1963, con el Concilio Vaticano II, hasta el regreso de Nuestro Señor y fin de los tiempos.
La iglesia de Laodicea:
Es la iglesia del futuro: tras el tiempo de la tribulación y el fin de los tiempos con sus tres días de castigo, más los cuarenta y cinco posteriores, hasta el fin del mundo y el juicio final. Simbólicamente mil años.