En una entrevista con Piers Morgan la semana pasada, el psicólogo canadiense expresó su indignación por la epidemia de procedimientos de «mutilación» trans en niños, y afirmó que los «sádicos asesinos» responsables de ellos deberían ser encarcelados de por vida.
Todo profesional médico que haya participado en la llamada “atención de afirmación de género” para menores “debería ser encarcelado por el resto de sus vidas” por cometer estos “crímenes contra la humanidad”, afirmó Jordan Peterson en una entrevista con el presentador de televisión británico Piers Morgan la semana pasada.
El exitoso autor canadiense, psicólogo clínico y periodista respondió a una revelación que hizo durante un podcast que realizó en julio con el magnate de los negocios Elon Musk . El propietario de ‘X’ (antes conocido como Twitter) compartió cómo lo «engañaron» para que aceptara darle a su hijo bloqueadores de la pubertad.
“Básicamente, me engañaron para que firmara documentos para uno de mis hijos mayores, Xavier”, recordó Musk en ese momento. “Eso fue antes de que realmente comprendiera lo que estaba sucediendo”.
«Me dijeron que Xavier podría suicidarse si no le permitimos tomar bloqueadores de la pubertad«, dijo.
“Eso fue una mentira desde el principio”, intervino Peterson durante ese podcast.
“Ningún médico fiable ha creído jamás eso”, continuó. “Nunca ha habido ninguna prueba de ello. Y, además, si hay una tasa de suicidio más alta, la razón es la depresión y la ansiedad subyacentes, y no la disforia de género. Y todos los médicos (…) lo saben también. Y son demasiado cobardes para decirlo abiertamente”.
“No puedo imaginar a un terapeuta haciendo algo peor que eso o quedándose sentado sin hacer nada y permaneciendo en silencio mientras sus colegas lo hacen; es patético”, denunció Peterson.
“En esencia, perdí a mi hijo”, se lamentó Musk. “Por algo lo llaman ‘nombre muerto’”.
“Así que mi hijo Xavier está muerto, asesinado por el virus de la mente despierta”, concluyó.
“Creo que todos los profesionales médicos y psicológicos que han desempeñado un papel en facilitar la matanza trans de niños menores deberían ser encarcelados por el resto de sus vidas por crímenes contra la humanidad”, respondió Peterson a Morgan el jueves pasado.
“Es el peor escándalo médico y, sin duda, psicológico que he visto en mi vida”, continuó. “Es absolutamente imperdonable”.
Al menos el Occidente angloparlante está sufriendo una “epidemia psicológica” que se manifiesta en una “epidemia trans” basada en mentiras “patológicas” que son “increíbles”, dijo Peterson.
En Estados Unidos, “al menos 8.000 mujeres jóvenes (menores de edad) han sido sometidas a mastectomías dobles”, explicó la psicóloga. “Y también sé que los medicamentos inhibidores de la pubertad están disponibles fuera de la comunidad médica, en el mercado negro y gris, en una proporción mucho mayor que dentro del ámbito médico”.
“Y los mentirosos dicen: ‘Esos niños ahora son libres de mostrar su verdadera identidad’, lo cual es otra completa mentira”, enfatizó. “Es totalmente inaceptable”.
Dirigiéndose a los partidos políticos de izquierda de Estados Unidos (demócratas), Canadá (liberales) y el Reino Unido (laboristas), Peterson dijo que si creen que “es una buena idea dar libertad a las mujeres jóvenes, en particular, para que encuentren su verdadera identidad como hombres, hay algo muy enfermizo en ustedes. Es inexcusable. Es absolutamente inexcusable. No hay ninguna prueba que sustente ninguna de esas afirmaciones de transformación de la identidad de género”.
Además, dijo que “cuanto más sepas sobre esa cirugía, más te destrozará la columna vertebral. Es medicina experimental llevada a cabo por sádicos asesinos en su máxima expresión. Lo que le hacen a la gente para transformarlos en pseudomiembros disfuncionales del sexo opuesto es mucho más que brutal”.
Además, la evidencia ha demostrado “desde hace mucho tiempo que los sádicos están sobrerrepresentados en la profesión de cirujano. Y todo lo que hay que hacer es pensar durante unos 15 segundos para poder entender por qué puede ser así”, dijo.
Por su naturaleza, estos procedimientos que implican la “esterilización y mutilación de niños” son “involuntarios” porque los menores carecen de la capacidad de consentir esa “carnicería trans” y, por lo tanto, tal intervención equivale a “un crimen contra la humanidad de acuerdo con las definiciones de la ONU”.
“Por eso creo que calificarlo de reprensible es apenas una pequeña muestra de ello. Y no creo que se detenga hasta que se impongan penas de prisión de la duración adecuada a las personas que han estado implicadas en el asunto”, concluyó Peterson.