El arqueólogo Steven Collins teorizó que la explosión sobre las ciudades de Sodoma y Gomorra pudo haber sido incluso mayor que el llamado Evento Tunguska de 1908, una gigantesca explosión en Siberia causada por la explosión de un meteorito.
Los arqueólogos han descubierto evidencia que parece probar la destrucción de la ciudad de Sodoma como se describe en la Biblia.
La discusión sobre la historicidad de la destrucción de Sodoma y Gomorra se reavivó recientemente cuando una entrevista con un erudito bíblico se volvió viral y CBN publicó un artículo titulado “Expertos confirman Génesis 19, ciudad bíblica destruida por una explosión 1.000 veces más grande que una bomba atómica”.
En un vídeo que ha sido visto más de 1,5 millones de veces, el erudito bíblico Dr. John Bergsma explicó por qué los arqueólogos creen haber descubierto los restos de la ciudad destruida de Sodoma.
Bergsma le dijo al presentador de podcasts católico Matt Fradd que no podía creer que la historia de Sodoma y Gomorra en Génesis 19 fuera histórica cuando él era niño.
“Fue un desafío a mi fe”, admitió.
Sin embargo, hace unos 15 años, Bergsma asistió a una charla de investigadores que hicieron descubrimientos arqueológicos en Tall el-Hammam, en Jordania.
“Mientras escuchaba esta presentación durante unos 45 minutos, cerca del final, comencé a darme cuenta, oh Dios mío, estas personas que presentan piensan que han encontrado las ciudades bíblicas de Sodoma y Gomorra”.
Bergsma explicó que el equipo de investigación de Steven Collins de la Trinity Southwest University creía que los restos de la antigua ciudad encontrados en el sitio arqueológico prueban que fue destruida por una explosión masiva similar a una bomba atómica.
La cerámica encontrada por los investigadores estaba vidriada con trinitita, un residuo vítreo que podría crearse al hacer estallar una bomba nuclear en el desierto.
«La trinitita es esa capa de vidrio que se obtiene cuando básicamente se activa una bomba atómica en el desierto, y se derrite el vidrio, y se obtiene una especie de formación cristalina que se llama trinitita, por lo que esta cerámica se elevó a más de 4.000 grados Fahrenheit durante un breve momento”, dijo Bergsma.
Según los investigadores, los restos humanos encontrados en Tall el-Hammam apuntan a una explosión masiva desde arriba que devastó la ciudad.
«Encuentran esqueletos humanos que están completos hasta aproximadamente la mitad de la columna vertebral, y luego solo hay una marca de chamuscado, y no hay nada en la parte superior del cuerpo, y encuentran el esqueleto detrás de una pared que tiene aproximadamente cuatro pies de alto«, Bergsma fijado.
“Entonces, ¿qué está pasando aquí? En pocas palabras, encuentran evidencia masiva de que una enorme ráfaga de calor proveniente del cielo a unos 25 grados sobre el horizonte incineró estas Ciudades Gemelas en el lado jordano del río [Jordán], justo al norte del Mar Muerto”.
«Desde una explicación material natural, esto parece la explosión de un meteorito«.
“Cuando un meteoro entra a la atmósfera, se calienta y luego explota, y puede ser como una explosión atómica, pero nuevamente, el momento, la ubicación y las ciudades coinciden con lo que se describe de Abraham y Lot en Génesis 19 y el capítulos circundantes”.
Bergsma dijo que estos descubrimientos cambiaron su visión sobre cómo interpretar la Biblia.
“Eso realmente cambió mi perspectiva sobre el Antiguo Testamento, Matt, porque lo que me señaló es que cosas que sonaban demasiado extravagantes para ser historia y que incluso yo, como creyente, me siento tentado a descartar, de repente y sensacionalmente se demuestra que son … ya sabes, en realidad es un evento histórico”, le dijo a su anfitrión.
Los descubrimientos de Collins y su equipo, tal como los describe Bergsma, parecen coincidir perfectamente con los relatos de Génesis 19 en el Antiguo Testamento:
Luego el Señor hizo llover azufre y fuego del cielo sobre Sodoma y Gomorra. Destruyó estas ciudades y todo el valle y a todos los habitantes de las ciudades y hasta las plantas del suelo. Pero la esposa de Lot miró hacia atrás y se convirtió en una estatua de sal. (Gén. 19,24-26)
Génesis y otros libros de la Biblia afirman que Sodoma fue destruida en represalia por la perversión sexual de sus habitantes, en particular los actos homosexuales, que las Escrituras llaman una “abominación”.
La explosión de un meteorito mil veces más grande que una bomba atómica
El arqueólogo Steven Collins teorizó que la explosión sobre las ciudades de Sodoma y Gomorra pudo haber sido incluso mayor que el llamado Evento Tunguska de 1908, una gigantesca explosión en Siberia causada por la explosión de un meteorito.
Un artículo publicado en Nature en 2021 confirma la teoría de Collins. Según los autores, que utilizaron una supercomputadora para analizar los datos del sitio de Tall el-Hammam, la explosión del meteorito que destruyó la antigua ciudad creó una explosión de 15 megatones, que habría sido mayor que el evento de Tunguska y habría tenido más más de 1.000 veces más energía que la bomba atómica de Hiroshima.
La explosión que probablemente destruyó Sodoma también creó grandes cantidades de sal, lo que posiblemente explica el relato bíblico de que la esposa de Lot se convirtió en “una columna de sal” (cf. Gén. 19,26).
El profesor emérito de ciencias de la tierra James Kennett dijo a la revista Relevant que “la sal fue arrojada debido a las altas presiones del impacto… [y] puede ser que el impacto haya golpeado parcialmente el Mar Muerto, que es rico en sal”.
Además de aniquilar a toda la población de Sodoma y Gomorra, la explosión dejó 500 kilómetros cuadrados de tierra casi inhabitables durante siglos, ya que la sal hizo que el suelo fuera infértil y, por tanto, inutilizable para la agricultura.
En un documento de conferencia de 2015, Collins y su colega Phillip Silvia escribieron : “Las muestras de suelo/cenizas recolectadas en Tall el-Hammam contienen evidencia de destrucción de la capa superior del suelo y contaminación del subsuelo con sales del Mar Muerto que habrían impedido el cultivo de cultivos. durante muchos siglos después del evento, lo que explica (al menos en parte) la larga pausa ocupacional”.
Nuevamente, esto parece confirmar la descripción de los eventos en Génesis 19, que muestra la devastación general en la región, incluyendo la pérdida de vida vegetal: “Y destruyó estas ciudades y toda la tierra alrededor, a todos los habitantes de las ciudades. , y todo lo que brota de la tierra”. (Génesis 19,25).